Veterano imperial paso a paso (I)

Por fin me decido a hacer un "reportaje fotográfico" del pintado de una de mis miniaturas. Es un poco tarde para este 'Veterano imperial', porque lo comencé hace tiempo, y, de hecho, lo he tenido abandonado desde diciembre (cuando comencé a prepararme los exámenes que esta semana terminaré), pero intentaré explicaros los pasos seguidos hasta ahora.
Alguno de los lectores (sé que al menos hay dos, lo cual es un alivio) se preguntarán por qué, habiendo tantas páginas y tantos trabajos sobre el pintado de las miniaturas, mucho mejores tanto en calidad como en medios, me pongo a contar aquí cómo pinto mis minis. Lo primero, porque, como es lógico, esta es una página personal en la que hablar de mis aficiones; lo segundo, es demostrar que, aunque uno sea un torpón plástico como yo, con un poquito de perseverancia puede llegar a pintar minis que dejen boquiabiertos a sus amigos.
En futuras entradas se irán demostrando las técnicas que suelo usar, pero expondré ahora el plan general que llevo a cabo en cada mini: pinto por capas, como si fuera 'vistiendo' a la miniatura, mediante el proceso capa base -> luces mediante veladuras/degradados -> sombras mediante veladuras/lavados; pero sin llegar nunca a las luces extremas ni a las últimas sombras, dejando ese trabajo para cuando ya tengo la mini acabada. (Es un poco rollo de explicar, pero lo veremos enseguida con ejemplos). Y bueno, por si alguien va un poco perdido, puede encontrar las técnicas explicadas en la Senda del Aventurero, el foro que usamos para nuestras quedadas. También he de decir que no me suele gustar mezclar mucho las pinturas, lo que me permite desarrollar el hobby de todo buen friki: el coleccionismo, en este caso de pinturas de varias marcas para tener la gama más amplia posible de tonos.

Pues al lío... La miniatura que me sirve de ejemplo es Luriel, Puño Sagrado, de la marca Andrea Miniatures (pueden encontrar imágenes en e-minis, donde suelo comprar). He cambiado la posición del torso, para que, en lugar de sacar tripa, parezca que descanse; y también la posición del mangual, que me pareció más dinámica (a pesar de que, irónicamente, se apoya en el suelo). Y por supuesto, la he añadido al mundo de Lüreon transformado en veterano imperial. Aquí tienen una foto de frente:
Es de remarcar también que la calidad de las fotos deja que desear si las comparamos con las de los profesionales, pero yo estoy la mar de contento con la cámara de mi novia; cámara, que me permite, por fin, poner a su disposición mis figuras.
Pues nada, lo dicho, intentaré explicar un poco el proceso de pintado que llevo hasta ahora. En primer lugar comienzo con la piel, que en este caso se reduce a la cara:
Para pintar la piel me gusta usar dos pinturas de las Foundation Paints (Citadel): Calthan Brown como base, e ir iluminando añadiendo Tallarn Flesh, y posteriormente con Hueso Deslucido (Citadel) o Carne Élfica (Rackham). En este caso, use la primera de ellas, reforzando como siempre pómulos, cejas, nariz,... Pero, como decía, sin llegar a luces extremas (que ya daré más adelante, aunque suponga volver a realizar las mezclas). Antes de liarme a hacer cosas más complicadas, trato de pintar los ojos con blanco puro, y un toque de negro (con un poco de suerte, no me salgo ni me toca repetir el contorno de ojos). Como la superficie a pintar no es grande, las luces las realizo con un degradado sucesivo, difuminando las diferencias entre las capas con un lavado controlado del color base. Para la calva, que me parecía un poco fea, decidí usar una especie de vitrificado con una mezcla de Marrón Quemado y Gris Codex (ambos Citadel) muy aguados, lo que provoca ese efecto de rapado que pueden ver en la parte izquierda de la cabeza (recuerden que eso es a la derecha en sus pantallas). En la barba, un tono de marrón como Amarillo de Kallienne (Rackham), con algún toque de blanco en las patillas y bajo el labio inferior, para simular canas. En la cara, lo que quedará hacer será añadir luces extremas en nariz y frente, y algunas sombras alrededor de los ojos. Pero eso lo dejaremos para más adelante.
Un detalle que no he comentado es que también suelo pintar las cosas que la mini 'sujeta', puesto que son capas más internas. En concreto el escudo ya está terminado:
Pintar este efecto de bronce es de lo más agradecido (por lo fácil que resulta llegar a que quede bien de verdad). Lo primero es pintar la zona con un color de metal oscuro, como una mezcla de Metalizado Bolter y Hojalata (ambos Citadel); le añadí algo de Verde quitina (Rackham) para que me sirviera no sólo como sombra profunda, sino también como recoveco manchado de verdín. A continuación vamos mezcando poco a poco un tono claro de plateado, como Plata (Andrea), dando pinceladas en las zonas altas y protuberantes del escudo. Estamos simulando una luz cenital, así que lo más fácil para saber dónde colocar las luces es poner la mini justo bajo la bombilla. Cuando estemos contentos con el resultado (que estará más bien plateado) llega el trabajo más importante y gratificante: mediante mezclas muy aguadas de Tinta negra, Tinta marrón y Tinta verde oscuro (todas de Citadel, pero en realidad sirve cualquier tono, no hace falta que sea tinta), vamos dando a la parte de sombras, para ir definiendo el efecto bronce. Por último damos algunos toques aguados de Verde antiguo (Rackham) allí donde nos plazca (en recovecos y curvas queda mejor) para simular el verdín. Está claro que fotografiar metal, es complicado, aquí tienen otra vista:
Como no ignoraba que ambas capas iban a molestarme para pintar la parte delantera, y por definir el carácter de la miniatura (estaba claro lo de la capa roja por ser un veterano de Brodiva, y por una vez quería seguir el impulso de Blanchett con la combinación rojo y negro), me salté a la torera lo de pintar por capas,... y pinté las capas.
La superior, que pinté después, fue bien sencilla: toda ella negra, pero para ir dando luces fui mezclando pequeñas cantidades de Verde oscuro (Andrea), para que sirviera un poco de complementario al rojo y quitara calor a la mini. Pero antes pinté la roja:
En ella opté por el clásico degradado, que luego fui difuminando mediante veladuras y vitrificados: la base fue Rojo de Arcavia (Rackham), y para las luces fui añadiendo Rojo Rackham (de... ¡sí, de Rackham! ¿Cómo lo habéis sabido?). Lo que falta ahora es subir un par de veces más las luces, pero eso lo dejo para cuando vea el efecto general.
El siguiente paso será pintar la túnica... para la que ya di el color base en, como no podía ser de otra forma, Azul básico (de Andrea). La idea es que el color vaya hacia el púrpura, ¡ya veremos cómo me queda!